martes, 26 de abril de 2016

¿QUÉ HARÍA HOY DON QUIJOTE CON LOS MOLINOS?

¡Subirse! Porque… - ¿Ves allí? - amigo Sancho-. Pienso asaltar aquellas pantagruélicas aspas que campean en el horizonte y bracean aventando aspavientos y espantando las sombras caliginosas de la ignorancia. Y bien parece que me inquieren y me avisan de que, a lomos de ellas, bien podríamos caminar y aventurarnos a hombros de gigantes. - ¿Qué gigantes? –dijo Sancho Panza. - ¡Sí, amigo! La ciencia, una empresa de la que Chéjov dijo que había más amor al hombre en el látigo de estos gigantes -la electricidad, en dar luz a las gentes, en explicar el mundo-, que en la castidad que pregonan aquellos dos bultos negros, que parecen dos cuervos croajando. - Mire, vuestra merced, que son dos monjes observantes de Santo Domingo de Silos, que fue lucero de gran luz y amante de las letras, pues como caballero no ignora -y yo lo aprendí en "Wikipedia"- que un claustro sin librería pareciese a un castillo sin armería. Presto se dispuso Don Quijote a poner en efecto sus pensamientos –que eran ligeros como el viento- con los que llenar su hacienda y olla, y se los llevó a un "e-book", o a un “blog”. Vamos, a una bitácora –amigo Sancho-, que es así cómo ahora se llaman los libros. Y ya no son los censores quienes los castigan con la pena del fuego. Son los lectores, o los “referee”, en los pocos de los críticos. Porque si el vulgo los tiene por gusto y los lee por buenos, mejor se gana de comer con los muchos - con el "pop", con lo “kitch”-, que con la opinión de cuatro discretos que los entienden. ¡Ah! Y ya no se queman, sino se descargan, se borran o se desinfectan. ¡Acuérdate de los diez mandamientos, amigo Sancho! Porque hoy del mucho escribir y poco leer a las gentes se les ha secado el cerebro, perturbado el juicio y están más solos que nunca -proseguía sermoneando-. Se comunican con tuits, con tomaduras de pelo, pero pocos saben que las golondrinas trisan o minuran, o que los halcones plipian, o que la lechuza de Minerva cutubía… - ¡Ay, el saber! - amigo Sancho. ¿Sabes que tu rucio magila o rebuzna, o que los cabrones mitan? –inquiría-. Y no basta en estos tiempos con ser literato, o guerrear contra los moros, pues ya no hay Bestiario de Don Juan de Austria sin científicos naturalistas o idealistas como no hay arroyo sin manantial, pues al final de nuestros días todo el amor estará puesto en el conocimiento. Y así, fatigado de estos pensamientos, cavilando, se fue nuestro Quijote a la academia de forofos, digo al bar. Allí verá a otro gigante que también gira, que rueda: el balón, la superficie más pequeña que encierra más sueños. Y aunque Borges diría que el fútbol es una aventura intelectual de estólidos, no hay otra universidad popular como la cantina para licenciarse en estos menesteres… El rector de aquel templo del saber era Evaristo, un socarrón merengue que lo regentaba con su hermana, Severina. Evaristo, el oficiante, decía que la mujer hasta los 16 era agua destilada, a los 25 “champagne”, a los 35 licor, y de 40 a 100 aceite de ricino. . ¡De gasoil es mi esposa, mi linda caleña! Es lenteja, como una caracola, pero con ella me enamoré de la Física y aprendí, definitivamente, que el tiempo es algo relativo –replicó alguien que devoraba el partido con los ojos, como jugándose la vida. -¡Mira, James, de tu país! –Otro colombiano, dijo Evaristo balanceándose por la barra-.De repente se detuvo y comenzó a batir los dedos por el mostrador, como tecleando un piano. Parecía ansioso por el resultado. Balbució algo: -¡Emeterio, tú tienes la culpa! Emeterio era un viejo que siempre sonreía con los ojos entornados y las manos en los bolsillos. ¡Cabrón! –Le espetó. Llegó el cojo en una moto. Alguien dijo: - ¡Ya viene el Feo! ¡Calienta, que vas a salir! –Le saludaron. Epi y su hermano se detuvieron en la puerta del bar y levantaron la mano. Si no les saludo no se van –apuntó Evaristo. A un fumador compulsivo le sonó un Nokia. “¿Digi?” –respondió con sorna increpando a los espectadores. - ¡Goooool, gooool de Cristiano! – sifló la televisión como una sierpe. ¡Fútbol digital, amigo Sancho! Porque el fútbol es un milagro, como la literatura. Es el espejo del mundo que nos transporta al territorio de la infancia. Y para terminar llegó el pitido final, el acabamiento del embeleco: mientras la cabeza me da vueltas y bailan las sensaciones, edito este cuento que, a buen seguro, tendrá entretenidos a desocupados lectores. VALE

martes, 26 de enero de 2016

REGLAS Y CONSEJOS DE DON SANTIAGO RAMÓN Y CAJAL

Con 45 años, en 1897, D. Santiago Ramón y Cajal escribió un discurso para su ingreso en la Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales de España: “Reglas y consejos sobre investigación científica en España”, que fue editado como libro en 1923. Los capítulos que aborda son: I) La observación y la experimentación –razonamientos inductivos y deductivos- son las fuentes del conocimiento. II) Luchar contra el sofisma de autoridad –como Galileo refutó a Aristóteles. III) No se debe distinguir ciencia y técnica ni teoría de práctica –ya lo hizo Pasteur con la analogía del árbol y la fruta-. Tampoco es preciso un especial talento para la ciencia - “I haven´t special talent. I´m only extremely curious”-. Únicamente se debe de tener curiosidad, perseverancia, independencia y amor a la patria y a la gloria. IV) Inspirarse en la Naturaleza, causa y ocasión de todos los libros. V) Evitar la enfermedad de la voluntad, el enciclopedismo, la teorización. El libro se subtituló: “Los tónicos de la voluntad”. VI) Compatibilizar tarea profesional con investigadora. VII) Evitar explicaciones aventuradas. La observación, experimentación y tests de hipótesis darán la razón de los fenómenos. VIII) En España la redacción científica tiende a la hipérbole y a la dilución aparatosa. Estilo sobrio, sencillo y sin afectación. IX) La naturaleza ha sido piadosa con la vejez por la resistencia del cerebro al paso del tiempo. Somos escultores de nuestro propio cerebro. X) El Estado debe aprovechar los dones de aprender de las clases humildes por el bien de la nación. XI) Se crea la Junta de Ampliación de Estudios y Pensiones pues Cajal, entusiasta, pretende que los estudiantes salgan a Francia, Inglaterra y Alemania. Los españoles, dados al espíritu aristocrático (vanidad irresponsable), la Inquisición (el clero se olvidó del hombre y de la naturaleza y hoy no vence la fe, sino la ciencia y la riqueza), las guerras inútiles, los Austrias, y otros… causaron el tradicional atraso de nuestro país en ciencias. El deleite intelectual estará en la ciencia que, a modo de iglesia de la naturaleza, tendrá como bóveda el cielo, como lámpara el sol, como altar la tierra y como ofrenda el conocimiento.

martes, 5 de enero de 2016

ROSA CANINA

Tengo un interés natural en saber cómo funcionan las cosas y la ciencia, ese ejercicio intelectual humilde y apasionante, nos proporciona las mejores respuestas frente a la incertidumbre. ¿Acaso no es apasionante conocer cómo se relacionan los seres vivos, por ejemplo los insectos y las plantas? El pasado domingo salí a correr por el camino de las Rozas. Antes de llegar a Báscones, al borde de una senda se apostaba un rosal silvestre -de la especie Rosa canina- desnudo de hojas y salpicado de escaramujos, que lucían como adornos navideños. Me paré y observé en un tallo una formación apelotonada y peluda, de color caoba. ¡Ya te tengo! –me dije. La arranqué y la llevé a casa para diseccionarla. Sin duda era una agalla, un fitoma o cecidio. Se trata de una neoformación inducida por un insecto, la avispa Diplolepis rosae, Hymenóptero de la familia Cynipidae. En inglés se conoce como nuez de bilis (gallnuts), por el sabor amargo de los taninos que segrega el rosal silvestre para precipitar las proteínas del invasor. Las agallas se utilizaban como colorantes. Las ninfas de estas avispas de tórax negro y abdomen rojizo viven dentro de la agalla, y se conocen fósiles de 300 M.a. de esta agalla. Una relación que interesa para conocer cómo interaccionan y responden los seres vivos.

lunes, 26 de octubre de 2015

ÁRBOL DE LA VIDA. HERBARIO

Este otoño estoy disfrutando de un libro, “Orígenes”, que se ha presentado recientemente en Burgos. Aunque debería ser más propio de la primavera, pues tres científicos de la talla de Alberto Fernandez (Físico), Carlos Briones (Bioquímico) y José María Bermúdez (Antropólogo) nos deleitan con un ensayo que narra la historia del universo, la vida y los humanos. Compartimento, metabolismo y replicación serían ideas básicas para definir la vida, nos dice Carlos Briones viajando al pasado, como lo hiciera Charles Darwin con su estrategia “bottom up”, de abajo hacia arriba, comparando los genomas de seres actuales desde aquel último ancestro común universal (UCLA) del que provienen todos los seres vivos, incluidos plantas y animales. Pero el otoño es tiempo propicio en Burgos para contemplar las plantas, los frutos, las hojas… en fin, la deliciosa explosión de colores verdes, glaucos (verdemarinos), amarillos, ocres, marrones y hasta rojos. Así que he decidido, siguiendo mi propio consejo, hacer un herbario, coleccionar plantas o patrimonio vegetal de la zona del Arlanza. Hojas de árboles y arbustos de la zona: como el endrino o majuelo, símbolo de la esperanza y del que dicen era el palo de San José; el abedul, árbol elegante que marcaba el inicio del año para los celtas; o el acebo, también para fabricar bastones; la encina, testigo del paso del tiempo que nos proporciona leña, bellotas y trufas; y el olmo, herido de grafiosis... Junto con el nombre común, el científico. Y tengo espacio para las flores y la poesía, como cuando Campoamor escribió “La col y la Rosa”: Una col en un cercado / probaba a una rosa bella / que era tan buena como ella / y aún de una tierra mejor / Mas aunque de cuna iguales / dijo un pepino: ¡Mastuerza! / ¿Dejarás tú de ser berza/ mientras que ella es una flor?

lunes, 13 de julio de 2015

QUIJOTE DEL ARLANZA 2015

Si prestan atención les contaré la inauguración del III Festival de Teatro de Cámara "Territorio Artlanza" con la entrega del Premio "Quijote del Alanza 2015" al dramaturgo José Luis Alonso de Santos. Un autor que no conoce la serendipia, o si la conoce las musas le encontraron trabajando pues nos sentimos acompañados por un hombre humilde, culto y el autor mas destacado del teatro nacional. Te atrapa su conversación y, mas que una comida en Lerma, asistí en su compañía a un banquete intelectual donde lo importante para mi no era el cordero sino la sopa de letras, donde cada bocado era una digresión y cada plato, salpicado de curiosidad, una tentación. Sí, pecado de gula por el conocimiento. Hablamos de la importancia del juego en los humanos, de esas ideas fuerza y vacuas como las de cultura, democracia,... de la actualidad, de Chejov, de ciencia -¡cómo me gusta su objetividad, rara en el mundo de las letras! Le regalé mi último libro de fútbol y él me firmó un librito suyo que yo había comprado en Avilés en 1985, cuando disfruté de una beca "Fundación Empresa Pública" para el estudio del alcoholismo. El librito, de la colección Escena, era la adaptación que Alonso de Santos hizo de una obra de Arthur Miller "Panorama desde el puente". Dicen que leer teatro es como escuchar música leyendo una partitura y aunque más tarde los relatos me atraparon, en aquella época me interesaban todos los géneros. Por la noche, al finalizar la velada tomando unas cervezas en la terraza del bar "El Bardal" nos regaló una frase,o mejor, una reflexión y un homenaje al castellano. Nos dijo: ¡Qué bién habláis todos! ¡Que música tienen vuestras palabras! ¡Cómo entonais! Gracias José Luis. Ésto dije en la presentación: Buenas noches. Gracias a todos ustedes por su presencia y atención. Bienvenidos. Por las relaciones fraternales e intelectuales que mantengo con mi hermano Félix este diletante médico tiene el honor de presentar la entrega del galardón que prologa el III Festival de Teatro de Cámara “Territorio Artlanza”. Festival que Félix organiza con “El Duende de Lerma” y que se celebra en este humilde e incomparable marco del Corral de Comedias Felipe-Segundo, que como ya sabrán no lleva el nombre del rey de España sino el de mis queridos abuelos. Se trata del premio “Quijote del Arlanza 2015” que este año ha recaido, merecidamente, en un maestro del teatro, en un actor, director, autor y profesor vallisoletano, de Castilla y León, por lo tanto de una tierra de autores Universales. Se trata de D. José Luis Alonso de Santos, el autor más destacado del panorama del teatro español. El premiado es Licenciado en Ciencias de la Información y en Filosofía y Letras y Catedrático de escritura dramática. Ha sido director de la Escuela Superior de Arte Dramático de Madrid y Director de la Compañía Nacional de Teatro Clásico y nombrado, en 2014, el primer presidente de la Academia de Artes Escénicas de España. Alonso de Santos participó hasta los años setenta como actor y director en grupos de teatro independiente hasta que estrenó su primera obra ¡Viva el duque, nuestro dueño! - En los ochenta estrenó “El Combate de Don Carnal y Doña Cuaresma” y en 1981 “La Estanquera de Vallecas”, su primer gran éxito llevado al cine por Eloy de la Iglesia y que tendrán la oportunidad de verla representada este domingo por Farsa Teatro de Madrid. - En 1985 estrenó su gran éxito, “Bajarse al Moro”, también llevado al cine por Fernando Colomo y con el que obtuvo el Premio Nacional de Teatro 1986. - Ya en 1995 estrenó “La sombra del Tenorio” monólogo que hoy nos representará El Duende de Lerma y “Dígaselo con Valium” que mañana nos presenta el grupo Dédalo de Madrid. Un hombre nacido para el Teatro que ha dirigido más de 40 obras propias y más de cincuenta de autores clásicos, ha escrito novela, relatos y ensayo José Luis Alonso de Santos cultiva la Tragicomedia, un teatro ameno entre la melancolía y la esperanza, con sentido del humor y con sensibilidad social. Utiliza un lenguaje natural –sencillo y elegante, que diría Chéjov-, que sirva para comunicarse, herramienta para el conocimiento, que es para lo que sirve el lenguaje. Y escribe sobre ese afán del hombre por sobrevivir, por estar en el mundo con esas servidumbres y pequeñas cosas de la vida cotidiana frente al destino, ese vasto paisaje de nuestra existencia. Dice ser un espía que mira con objetividad las causas de la gente corriente, de perdedores, de personas en paro, en crisis –vivos retratos humanos-, pero él no quiere ser un gurú, un cura, ni maestro, ni juez, aunque al final redime a sus personajes narrando sus problemas. José Luis ha sido galardonado con numerosos premios, El Nacional de Teatro en 1986, el Tirso de Molina, Medalla de oro de teatro de Valladolid, y el primer dramaturgo Premio Castilla y León de las Letras en 2009. En 2013 ha donado a la Fundación Jorge Guillén su fondo documental. Y hoy, este dramaturgo, con su excepcional carrera profesional, ejemplo de sencillez, dedicación y pasión por el Teatro, nos honra aceptando este “Premio Quijote del Arlanza 2015” dando así esa brillantez particular, la de una estrella, a la que premiamos en este espacio de arte, de imaginación y de pasión. Con ustedes un autor que se identifica como un indomable Quijote que se ha dedicado en cuerpo y alma al teatro y que merece todo nuestro respeto y reconocimiento: D. José Luis Alonso de Santos. Gracias

martes, 30 de junio de 2015

VACUNAS. MORIR DE ÉXITO

Si prestan atención les contaré… Que, según el Boletín Técnico de la Dirección General de Sanidad, en el mes de mayo de 1930 murieron en España 78 personas de difteria (1 en Burgos), 108 de tosferina (3 en Burgos) y 504 de sarampión (14 en Burgos). Que sí, se puede. Se puede morir de éxito. Y esto es lo que ha sucedido con las vacunas. Ya no existe una percepción del riesgo de estas enfermedades por parte de la población. Desde 1986 no se había notificado casos autóctonos de difteria en España (el garrotillo, que se decía en nuestro país en la edad de Oro de la Medicina Española de los siglos XVI y XVII). Las vacunas son la herramienta más eficaz y eficiente de la Salud Pública pues tan solo suponen el 0.3% del presupuesto y la OMS estima que salvan entre 2 y 3 millones de vidas al año en el mundo. En Burgos llevamos años sin tener casos de sarampión, ni de rubéola, ni de difteria, ni de tétanos, pero en 2014 aún declaramos un caso de meningitis, 13 casos de tos ferina, 37 casos de parotiditis y 818 casos de varicela. ¿Por qué reemergen las enfermedades infecciosas? Tenemos una relación contenciosa con los agentes infecciosos, una guerra armamentística, pues son seres vivos que conviven con nosotros y, en la mayoría de ocasiones, de forma pacífica. Pero una causa de reemergencia son los movimientos de población, o la disminución de coberturas por esa falsa sensación de que ya han desaparecido, o por los movimientos anti-vacuna, que afortunadamente no son numerosos en nuestro país, y por las propias limitaciones de las vacunas, como es el caso de la antiparotiditis. ¿Por qué de estos movimientos anti-vacunas? En el norte de la provincia de Burgos también existen seguidores o militantes de estos movimientos. Algunos de ellos enfatizan efectos secundarios de algunos componentes, otros piensan que también los vacunados enferman, otros que supone una sobrecarga del sistema inmune, otros únicamente ven el mundo gobernado por la codicia de las farmacéuticas, otros por motivos religiosos, y muchos por ignorancia, irracionalidad o esa moda de la falacia naturalista, de ecologismo, de adoración a “Gaia”, a la madre naturaleza, la de pensar que es mejor pasar la enfermedad natural que vacunarse con algo artificial. Y esta epidemia de irracionalidad afecta igual a conservadores –que se oponen a toda manipulación de células madre- que a progres –quienes se oponen a los organismos modificados genéticamente o al fracking etc…En fin, nuevos luditas. Pero el papel que nos corresponde a los técnicos es el de acercar la percepción de riesgo que tienen los ciudadanos con el riesgo real. Nadie va a querer mas a sus hijos que los padres pero la reciente muerte por difteria de un niño en Olot, que no se encontaba vacunado por decisión de ellos, es una muerte evitable debida a la negligencia de sus progenitores. Evaluar los riesgos e informar e influir en las decisiones de las políticas públicas. ¿Cómo protegen las vacunas? Se dice que las vacunas son solidarias pues protegen incluso a quienes no se vacunan. Esto ocurre de dos maneras: por inmunidad de rebaño, como ocurre con las vacunas vivas, pues pueden inmunizar a las personas del entorno, y por la llamada protección de rebaño, que supone tener menos probabilidad de encontrarnos con enfermos o portadores si la gran mayoría de población se vacuna. Únicamente dos vacunas protegen individualmente a las personas: la del tétanos y la de la rabia. ¿Deben ser obligatorias las vacunas? En nuestro país generalmente se piensa que no es necesario obligar aunque se conozca como calendario obligatorio. Pero no lo son pues se alcanzan elevadas coberturas. El estado tiene muchas formas de proteger y promocionar la salud (proteger la salud es el derecho reconocido en la Constitución) como informar, invitar, incentivar, restringir o eliminar u obligar, en el supuesto de riesgo para otros como así contempla la Ley de Medidas Especiales de Salud Pública 3/86 de 14 de abril. Esta medida ya se aplicó en un colegio de Granada donde se obligó a vacunar de Triple Vírica. Veremos si de la misma manera que avanza el populismo en Europa estos movimientos no crecen y causan problemas. Ahora está reemergiendo el sarampión en Francia y Alemania. En Salud Pública priman los principios de Justicia y Beneficencia pero si hubiera un conflicto de principios la Justicia será prioritaria sobre la Autonomía individual. ¿Cuál es la importancia de los calendarios vacunales? Pues que tienen una dimensión, además de personal, colectiva, que adoptan estrategias poblacionales desde la Salud Pública para evaluar los problemas, su gravedad, su vulnerabilidad, si hay vacuna segura y efectiva, si cambia la epidemiología de la enfermedad, si existe suministro seguro… Para mi el mayor problema de los calendarios es perder la confianza en los programas de vacunación y en eso tenemos la culpa también los médicos, que no todos estamos vacunados frente a vanidades, irracionalidad etc… Mi mayor decepción profesional ocurrió en la última pandemia de gripe cuando un médico salió en televisión desaconsejando la vacuna frente a la gripe pandémica pues era de los que pensaba que el virus H1N1 era únicamente un invento de la codicia de las farmacéuticas. Esta desconfianza y contradicciones entre profesionales, como ha ocurrido con la varicela en España, dañan la confianza en los calendarios. Algunos médicos piensan que las autoridades de salud pública van contra la libre prescripción de vacunas pero lo peor puede ocurrir es que las personas adopten decisiones individuales. Ahora el BNG quiere presionar para que se incluya la vacuna frente al meningococo B. Lo mejor sería que tuviéramos un calendario común basado en la evidencia científica (como fue la decisión de incluir la vacuna de Prevenar frente al neumococo), pero la realidad española es que esta competencia la tienen las Comunidades Autónomas; también que la población confíe en que si existe un problema el sistema sanitario sabrá resolverlo. Además las fichas técnicas tienen naturaleza jurídica y sirven para informar a profesionales y ciudadanos. Entonces ir a comprar una vacuna a otro país y ponerla fuera de calendario acarrea responsabilidades profesionales. ¿Y las farmacéuticas? En España varias Comunidades Autónomas, entre otras la nuestra, decidieron hacer compra centralizada de vacunas con un ahorro relevante en este medicamento Pero las empresas no son hermanas de la caridad y también pueden caer en el monopolio, el desinterés o bien en el uso discrecional, como está ocurriendo con la vacuna frente a tos ferina, que está produciendo un desabastecimiento en Europa. Pero vivimos en el mejor de los mundos posibles y el sistema económico actual nos debe permitir hacer mas amable nuestra existencia y afrontar los retos de envejecimiento y sostenibilidad para seguir disfrutando de las vacunas y de nuestro Sistema Nacional de Salud.

jueves, 25 de junio de 2015

EL MARCO DE BURGOS

Hoy les hablaré de un libro… En realidad de un libro de quien fuera el médico de Felipe II, Francisco Valles de Covarrubias, “El Divino”. Fue la última obra del médico rachel y la única escrita en castellano (queda un único ejemplar en la Biblioteca Nacional). Me refiero al “Tratado de las aguas destiladas, pesos y medidas de que los boticarios deben usar por nueva Ordenanza y Mandato de Su Majestad y Su Real Consejo. Francisco Valles. Imprenta de Luis Sanchez. Madrid 1592. Biblioteca Nacional de Madrid, Sección Raros y manuscritos, Sig. R/276”. La historia cuenta que el rey Alfonso X “El Sabio” había hecho traer a Burgos el marco de Colonia, cuyo peso estaba fijado en 8 onzas, para que sirviera de regla o estándar de medida de peso. Pero fue con los Reyes Católicos cuando aparecieron las primeras ordenanzas específicas para boticarios sobre metrología farmacéutica. El marco de Burgos era igual al marco romano, que usaba el sistema decimal para los números enteros pero el sistema duodecimal para las fracciones. Por ejemplo, un punto en una moneda significaba la doceava parte de un as, también denominada “uncia” u onza. Posteriormente los Reyes Católicos normaron que el vino y la miel debían medirse en cantaras, que equivalían a ocho azumbres. El pan, las legumbres y la sal en fanegas, equivalentes a 12 celemines. Resulta que “El Divino”, como buen médico humanista renacentista, indagó en las fuentes de la antigüedad clásica y vio la necesidad de explicar un problema de pesas y medidas que había aparecido en la Edad Media en los textos de la Escuela de Salerno, el único reducto cultural cristiano que seguía un sistema de pesos y medidas diferente al romano. Debido a ello, según Valles, se modificaba la acción de los medicamentos elaborados. Arriba se presentan en la tabla las equivalencias de las medidas de peso, que provenían de los romanos, expresadas en “granos”, “lens” o “primus” (de trigo) en la que un marco de Burgos equivalía a 8 onzas o lo que es lo mismo que 4608 granos. Los romanos usaban como medidas de superficie las del trabajo (1 yugo= 1 día de trabajo); como medida de longitud el pié, equivalente a 16 dedos o 4 palmas, y como medidas de capacidad el “Modius”(8,754 litros), el “Sextarios” (0,547 litros) y la “Hemina” (0,274 litros), que era la cantidad de vino que la Orden de San Benito permitía beber cada día a los monjes. Vale